Hemos ido toda la familia y la casa está adaptada para todas las edades incluso con juego y sin jardín con columpios. Completa de todo lo que puedas necesitar para tu estancia. Acogida inmejorable por parte de Noelia que nos había hecho un bizcocho buenísimo para desayunar. Había agua y leche, café, cola cao y galletas. Mejor imposible.