El hotel tiene unas zonas comunes muy bonitas, piscina grande, comedor grande ..
las habitaciones son grandes pero no hay nevera dentro y si compras aunque sea agua no tienes donde refrescarla.
Para llegar es complicado, ya que está dentro de un recinto cerrado de urbanizaciones y necesitas un código para entrar.
Por lo demás, el personal correcto y muy amable.
Tener en cuenta que en temporada alta no hay mucho donde cenar cerca y coger el coche es una locura, hay muchos atascos. Muchas urbanizaciones y rotondas con pocas accesos de carreteras.